Tomar la decisión de abrir, expandir o relocalizar las operaciones de una empresa es un paso muy importante para la sostenibilidad y rentabilidad de la misma. En este punto, aparece una decisión que es clave para este proceso: comprar o arrendar. Esta consulta es frecuente en los procesos de consultoría que realizo y cada caso es único, por eso es importante conocer las diferencias y ventajas de comprar o arrendar un local, bodega u oficina para desarrollar las operaciones de tu empresa.
Frecuentemente al momento de atender las consultas de empresarios cuando buscan un espacio, la primera consulta que realizo luego de entender su operación, es si buscan un inmueble en compra o en arriendo. A partir de allí y entendiendo los detalles de su operación y crecimiento puedo brindar una correcta consultoría inmobiliaria corporativa. Ambas opciones tienen sus ventajas y desventajas, pero la decisión final dependerá de la situación financiera y comercial de cada empresa.
En este artículo, exploraremos las diferencias y ventajas de comprar o arrendar un local, bodega u oficina para desarrollar las operaciones de tu empresa.
Ventajas de comprar el inmueble
Estabilidad: Al comprar un espacio, la empresa tiene la seguridad de que siempre tendrá un lugar donde desarrollar sus operaciones. No tendrá que preocuparse por renovar contratos de arriendo, ni por la incertidumbre de tener que cambiar de ubicación. Esto también se traduce en bienestar para los empleados ya que una empresa que rote constantemente de sitio de operaciones, impacta los tiempos de movilidad de sus trabajadores.
Inversión a largo plazo: Al comprar un espacio, la empresa está realizando una inversión a largo plazo. En el futuro, el valor del espacio podría aumentar y si la empresa decide venderlo, podría obtener una ganancia.
Control sobre el espacio: Al comprar un espacio, la empresa tiene control total sobre él. Puede realizar remodelaciones y mejoras a su gusto, sin tener que pedir permiso al propietario.
Posibilidad de generar ingresos adicionales: Si la empresa no necesita utilizar todo el espacio que compró, puede rentar una parte y generar ingresos adicionales. De hecho, así han surgido unidades de negocio inmobiliarios dentro de grandes compañías.
Ventajas de arrendar el inmueble
Flexibilidad: Al arrendar un espacio, la empresa tiene la flexibilidad de cambiar de ubicación si sus operaciones cambian o el mercado fluctúa. También tiene la posibilidad de arrendar un espacio más grande o más pequeño según sus necesidades.
Ahorro de costos: Al arrendar un espacio, la empresa no tiene que invertir una gran cantidad de dinero inicialmente. Además, los costos de mantenimiento y reparaciones son responsabilidad del propietario.
Liquidez: Al arrendar un espacio, la empresa no está comprometiendo una gran cantidad de capital en una inversión a largo plazo. Esto significa que tendrá más liquidez para invertir en otras áreas de su negocio.
Opciones de ubicación: Al arrendar un espacio, la empresa tiene la posibilidad de ubicarse en zonas más exclusivas o más accesibles que si comprara un espacio.
Orienta tu decisión desde el punto de vista financiero
Para tomar la decisión de comprar o arrendar un espacio, es importante considerar los componentes financieros de cada opción. Al comprar un espacio, la empresa tendrá que invertir una gran cantidad de dinero inicialmente y tendrá que hacer frente a los costos de mantenimiento y reparaciones. Por otro lado, al arrendar un espacio, la empresa tendrá que pagar una renta mensual y las adecuaciones pueden ser negociadas por períodos de gracia con el arrendador.
Es importante que la empresa evalúe su situación financiera actual y futura antes de tomar la decisión de comprar o arrendar. Si la empresa tiene suficiente capital y está dispuesta a invertir a largo plazo, la compra puede ser la mejor opción. Si la empresa prefiere tener más liquidez y flexibilidad, el arrendamiento puede ser la mejor opción.
Ten presente un análisis comercial
Además de los componentes financieros, es importante considerar los componentes comerciales de cada opción. La ubicación y el tipo de espacio pueden afectar la imagen de la empresa y su capacidad para atraer clientes y empleados.
Si la empresa necesita estar ubicada en una zona exclusiva o específica para su negocio, la compra puede ser la mejor opción. Al comprar un espacio, la empresa tiene control sobre su ubicación y puede elegir la zona que mejor se adapte a sus necesidades. Si la empresa necesita flexibilidad para cambiar de ubicación o no necesita estar en una zona específica, el arrendamiento puede ser la mejor opción.
Otro componente comercial importante a considerar es el tamaño del espacio. Si la empresa necesita un espacio grande y tiene suficiente capital para invertir, la compra puede ser la mejor opción. Si la empresa no necesita un espacio grande y prefiere tener más liquidez, el arrendamiento puede ser la mejor decisión.
Según un estudio de la firma de bienes raíces CBRE, el 67% de las empresas en todo el mundo eligen arrendar sus instalaciones en lugar de comprarlas. Este número ha aumentado en los últimos años debido a la creciente importancia de la flexibilidad y la agilidad en el entorno empresarial actual.
Por otro lado, un estudio de la consultora PwC muestra que las empresas en el sector manufacturero tienden a preferir la compra de instalaciones, mientras que las empresas en el sector de servicios tienden a preferir el arrendamiento. Según este estudio, las empresas en el sector manufacturero a menudo necesitan instalaciones personalizadas y de gran tamaño, lo que puede hacer que la compra sea una opción más viable. Por otro lado, las empresas en el sector de servicios a menudo pueden adaptarse mejor a espacios existentes y prefieren la flexibilidad que ofrece el arrendamiento.
Otro estudio realizado por la firma de servicios inmobiliarios JLL muestra que las empresas en el sector de tecnología de la información y la comunicación, así como los BPO tienden a preferir el arrendamiento de instalaciones. Según este estudio, las empresas en este sector a menudo prefieren la flexibilidad y la agilidad que ofrece el arrendamiento, ya que el entorno empresarial en el sector de tecnología cambia rápidamente y las empresas necesitan adaptarse rápidamente a los cambios.
¿Se puede combinar los dos negocios: venta y arriendo?

Existe una modalidad cada vez más interesante y es que alguno de los socios o el dueño de la empresa adquiera el inmueble donde esta desarrolle su actividad y puede hacerlo a título personal o través de otra sociedad cuyo objeto social sea solo el inmobiliario. Este análisis es interesante porque a nivel comercial y de cara a interlocutores como copropiedades, constructoras, desarrolladores inmobiliarios, actúas como propietario del inmueble.
Pero a nivel financiero aligeras la carga tributaria de la empresa al operar sin tener un activo fijo, mejorando tus indicadores de rentabilidad en la operación llevando al gasto el valor del arrendamiento. Esta figura la utilizan empresas reconocidas del sector retail, como por ejemplo, la tienda de moda Arturo Calle que ha logrado un crecimiento interesante de sus formatos en Colombia y algunos países de la región, adquiriendo en compra locales con ubicaciones estratégicas en centros comerciales y teniendo una fuerte influencia con voz y voto en las decisiones propias de la copropiedad.
En resumen, los estudios y estadísticas sugieren que la mayoría de las empresas en todo el mundo eligen arrendar sus instalaciones en lugar de comprarlas. Sin embargo, la decisión final depende de las necesidades y objetivos únicos de cada empresa, y es importante que las empresas evalúen cuidadosamente sus opciones antes de tomar una decisión.
En última instancia, la decisión final dependerá de la situación única de cada empresa y de lo que mejor se adapte a sus necesidades y objetivos.
Para tu empresa, ¿cuál es la mejor opción: comprar o arrendar? ¡Conversemos!